Nos encanta inspirarte y compartirte lo que aprendemos por eso, en el día de hoy, queremos darte nuestra guía con pequeñas acciones e intenciones que te ayudarán a tener una jornada positiva y exitosa:

Que al abrir tus ojos, tu primera reacción no sea un pensamiento sino un movimiento. Estirá tu cuerpo, movelo de a poco para traerlo al mundo después del descanso.

Al bajar de la cama, no lo hagas a las apuradas casi tirándote desesperadamente sino alineando tu primer paso con una intención. Entonces, apoyá primero tu pie dominante sobre el suelo y al mismo tiempo afirmá, por ejemplo, “Hoy me va bien en la entrevista y consigo el empleo”.

Después de lavarte la cara o bañarte y antes de preparar tu desayuno, despertá tu cuerpo, tu mente y tu energía de la siguiente forma (No te llevará más de diez minutos)

Realizá dos secuencias de saludo al sol (Una con cada pierna).

Mantenete de pie, con las piernas separadas al ancho de caderas y las manos juntas sobre el pecho, palma con palma. Tomá cinco respiraciones profundas y conscientes y afirmá tus pies sobre el suelo, tu coronilla hacia el cielo y tu pecho hacia adelante. Mientras lo hacés, enunciá dos agradecimientos: Uno por algo de tu vida y otro por algo de vos mismo.

Ya estás listo para desayunar algo rico y salir a crear un día productivo. Y si algo no sale como lo esperabas, al menos abriste tu mañana con la mejor energía y, creénos, va a vitalizarte.