Utilizada hace al menos 5.500 años dentro de la medicina naturista, el aloe vera es una es uno de los remedios más versátiles. Aunque es comúnmente es una planta conocida por servir de calmante para la piel (se usa para tratar quemaduras solares, eczemas y acné) sus más de doscientos compuestos pueden ayudar a sanar nuestro organismo. De hecho, hace tiempo forma parte del popular grupo de los superalimentos junto a la espirulina, las bayas de goji y las semillas de chía entre otros.
Consumirlo en forma de elixir, por ejemplo, le tiene poderosos beneficios para la salud ya que sus nutrientes no se pierden en el procesamiento, sino que se conservan intactos y se potencian entre sí.
Beneficios
Hidratante. Al ser una planta constituida por 99% de agua su consumo ayuda a prevenir o tratar la deshidratación. Mantenerse hidratado ayuda al cuerpo a desintoxicarse y eliminar las impurezas. Por otro lado, sus nutrientes que optimizan la producción de los órganos de los riñones y el hígado, principales responsables en limpiar la sangre y producir orina. El sitio Healthline recomienda beber jugo de aloe para recomponerse luego de ejercitar.
Digestivo. Al aumentar el contenido de agua en los intestinos ayuda a combatir el estreñimiento y la aerofagia (sensación de tener aire en la panza). El jugo aloe también ayuda a normalizar las bacterias saludables en el intestino, manteniendo equilibrada la flora intestinal saludable.
Antiácido. Al contenter resinas protectoras repara daños de tejidos y úlceras, ayudando a controlar la secreción de ácido en el estómago.
Fortalecedor inmunológico. Su alta concentración de polisacáridos ayudan a humectar, reparar y estimular el crecimiento de la piel, pero también, según los investigadores es lo que le permite al organismo defenderse de bacterias y gérmenes agresores.
Limpia el colon. El aloe barre la mucosidad sobre las paredes del colon en las que se depositan las toxinas que consumimos en exceso, un caldo de cultivo para bacterias y parásitos que pueden generar enfermedades. Teniendo en cuenta, como explica un artículo en La Nación que el colon es la región del intestino grueso que en la medicina holística representa a todo el cuerpo, al barrer las mucosas y limpiar la región, el efecto del aloe se extiende a todo el organismo.
Efecto antiage. Sus propiedades antioxidantes están indicadas para prevenir el envejecimiento celular, limpiar la sangre de toxinas y combatir los radicales libres que envejecen la piel. Además, su jugo contiene hormonas naturales que impulsan al crecimiento de nuevas células y producción de colágeno.
Tanja Hirschensteiner, autora de “Remedios Naturales: secretos de la medicina alternativa” recomienda consumirlo de la siguiente manera.
1. Con un cuchillo afilado, pelá las hojas y asegurate de deshacerte de la aloína, una sustancia que funciona como un fuerte laxantes, que se encuentra entre la pulpa y la hoja. Para ello, prepará una solución con 15 ml de vinagre blanco y 230 ml de agua.
2. Juntá 20-30 grs del gel de aloe.
3. Sumale unos 500 ml de jugos de frutas (por ejemplo ananá o naranja)
4. Bebé 3 veces al día durante tres semanas. Recordá que no se recomienda para embarazadas ni para niños menores de 6 años.