A medida que transcurren los años, la memoria se va convirtiendo en un privilegio necesario de mantener. El envejecimiento cognitivo es algo natural que le toca a todos, por lo que estimular el proceso de recordación es una cuestión clave.

Dale actividad a tu mente

Así como el ejercicio físico contribuye favorablemente en el cuerpo, el ejercicio mental ayuda a mantener el cerebro activo. Actividades como juegos de palabras cruzadas, cambiar la ruta al manejar el auto, aprender a tocar algún instrumento musical y hasta participar en un voluntariado son ideales para beneficiar la memoria, según un artículo publicado en el sitio de noticias de Clínica Mayo.

Dormí lo necesario

Algo tan cotidiano como dormir las ocho horas diarias que necesitamos es esencial  para la concentración y la memorización. Mientras dormís, tu cerebro se encarga de clasificar toda la información absorbida a lo largo del día, por lo que si dormís poco o mal, pueden confundirse los recuerdos, según señala una nota de En Femenino.

Sé sociable

Mantener relaciones con otros individuos ayuda a prevenir la depresión y el estrés, dos condiciones que pueden contribuir a la pérdida de memoria. Por eso, especialmente quienes viven solos y tienen poco tiempo de ocio, deben buscar oportunidades para compartir tiempo con seres queridos, amigos y otras personas, como menciona la Clínica Mayo.

Organizate

Ya sea en tu agenda o en las tareas del hogar, es importante crear un orden y organizar las prioridades para que tu cabeza acompañe y se mantenga en forma. Acordate de anotar todos tu “to-do”, en post-its, la agenda, el bloc de notas o el celular, como recomienda En Femenino.

Hacé ejercicio físico

Entrenar aumenta la presión sanguínea en todo el cuerpo, incluyendo el cerebro, lo cual puede favorecer al cuidado de la memoria. Se recomienda realizar al menos 150 minutos semanales de actividad física moderada (una caminata a paso ligero) o 75 minutos de actividad intensa (trote), según explica Clínica Mayo.

Evitá las sustancias dañinas

Limitá el consumo de alcohol, tabaco, café o té, que pueden perjudicar la concentración mental debido a sus componentes. En cambio, nutrite con alimentos sanos y ricos en proteínas, como las frutas, verduras y cereales integrales, según el sitio mencionado.